Aquí lo tenéis en cifras.
Parece que sigue la racha iniciada con Lycos, seguida por Terra y continuada por TuMe, Joyn, y otras muchas.
Explicación corta: fue comprada por Telefónica.
Explicación extensa: Telefónica invierte en empresas del sector TI que luego acaban por derrumbarse por algún extraño motivo.
Tuenti es una red social de gran éxito en España. Con una funcionalidad similar a Facebook pero con peculiaridades que la hacían interesante entre los usuarios españoles, fue ganando adeptos hasta que hace unos años Telefónica decidió comprarla. En 2010 adquirió el 90% de la empresa y hace unos meses, el 10% restante para quedarse con la totalidad.
Una historia de fracasos
Sin conocer los entresijos íntimos de cada caso, muchas de sus iniciativas y adquisiciones en el sector de las TI como usuarias de las redes de comunicaciones han sido un completo fracaso.
¿Por qué?
Telefónica insiste en adquirir empresas del sector de las TI. Posiblemente piensan que están relacionadas con su negocio. Se han dado cuenta de que el margen de las compañías que usan la infraestructura de comunicaciones es mucho mayor que el que obtienen las empresas que desarrollan y gestionan dichas infraestructuras.
Y, así las cosas, la solución es obvia: pasarse al lado de los que generan tráfico, contenido y hacen uso de dichas redes. ¿O no?
¿Está justificado?
Quizás Telefónica necesita fracasar: quizás sea la forma de aprender, de entrar en un negocio en el que hasta ahora estaban ausentes. El fracaso no tiene por qué ser malo, de hecho es una de las mayores fuentes de aprendizaje si se sabe aprovechar. Pero el fracaso si es caro en algunos casos y hay que tener cuidado en cómo fracasar para no acabar llevando a la empresa a una situación comprometida.
Quizás sólo sea cuestión de mala suerte, puede ser.
Pero también puede ser que la inexperiencia en un sector tan competitivo, tan distante a lo que Telefónica ha sido históricamente, tan diferente en mentalidad sea un «gap» insalvable que hace que esta empresa esté condenada al fracaso una y otra vez en este sector.
Alternativas
Telefónica puede innovar sin tener que salir de su sector. La gestión de la infraestructura de comunicaciones es un campo tan amplio que se puede vivir dentro de él sin tener que pensar en salir a corto plazo. La innovación puede ser tanto técnica como de gestión. Y creo que ese sector necesita una verdadera revolución, sobre todo en gestión y planteamiento comercial.
Por otra parte, si Telefónica insiste en seguir invirtiendo en servicios añadidos, quizás debería plantearse la manera en la que lo está haciendo. Estoy casi convencido de que el problema no radica en la elección de las empresas en las que se invierte, sino en cómo se gestionan dichas empresas después de la compra.
Quizás a Telefónica no le importe mucho fracasar. En el sector de las TI un éxito entre diez iniciativas es un ratio bastante más que aceptable. Es posible que sea ésta la justificación que ofrezca la empresa a sus miembros del consejo de administración y accionistas.
Conocimiento del mercado
Hay cosas que para cualquier internauta informado son obvias: competir con el efecto red es complicado y más si no ofreces una novedad lo suficientemente diferenciadora como para arrancar a los usuarios de una aplicación para llevarlos a otra.
Es obvio que para competir con Skype no sólo tienes que igualar sus condiciones técnicas y darle publicidad. Tienes que conseguir que mis contactos se pasen a tu alternativa para que yo les siga. Competir con Skype es muy difícil a estas alturas incluso para la gente de Google.
Lo mismo ocurre con Whatsapp: no dejaré de usarlo hasta que la alternativa que me plantees no sólo mejore lo que actualmente hago con Whatsapp, sino que mis contactos también lo piensen y se animen a usarlo.
Con otras adquisiciones como Terra, lo que ocurrió es que entraron tarde en un mercado que estaba en decadencia: los portales. No se dieron cuenta y compraron en el peor momento. Como en aquella época los proveedores de internet (ISP) crecían como setas, dirigieron Terra a ese sector. Justo después la burbuja de los ISP explotó y quedaron 5-6 entre los que no se contaba a Terra.
Con Tuenti puede estar pasando algo similar. Y creo que les ha pillado con el paso cambiado de nuevo. Ya veremos en qué acaba todo, pero su futuro no pinta bien.
Conclusiones
Innovar es bueno, invertir en otras empresas es bueno, salir de tu mercado es bueno, diversificar es bueno. Pero todo esto hay que hacerlo bien. El fracaso es una buena y cara manera de aprender.
La flexibilidad, la adaptación y la capacidad de aprendizaje son imprescindibles cuando alguien sale de lo que está acostumbrado a hacer.