Ayer, como tantos otros días de los últimos meses, recibimos una nueva llamada desde el teléfono 911319395. Esta vez a las 16.15, justo el momento en el que casi había caído presa de una adorable siesta que complementaba mi estado griposo y febril.
Ésta fue la gota que colmó el vaso. El día anterior fue a las 21.30, con los niños en la cama y durante la semana pasada habían alternado mañanas y tardes.
Es una llamada realizada de manera automática por un ordenador que, seguramente, contiene números de teléfono elegidos al azar más teléfonos proporcionados por terceros. Para que la llamada sea efectiva, el destinatario tiene que descolgar el teléfono y, a continuación, tiene que existir un interlocutor por parte de la empresa que esté disponible para entablar una conversación. Si esto no ocurre pasados unos segundos, el sistema corta la llamada.
Si probáis a llamar al teléfono 911319395 veréis que no se puede realizar la conexión con este número. El sistema no admite llamadas de vuelta.
Hasta que una conjunción de los astros no provoque que el futuro cliente descuelgue y el operador pueda atender su llamada, estaréis preguntándoos quién es el que llama a casa con tanta insistencia y a horas tan dispares. Una vez que averigüéis que se trata de un distribuidor de Digital Plus, vuestros odios tendrán una diana.
Qué fue distinto esta vez? Pues que llamamos a Digital Plus y, tras pasar por un HORRIBLE sistema automático de recepción y clasificación de llamadas que no acertó ninguna de las veces que tuvimos que decirle qué queríamos, conseguimos que nos atendiera una amable teleoperadora.
– Buenas tardes, le atiende …, en qué puedo ayudarle?
– Buenas tardes, queríamos darnos de baja de todo lo que podamos que tenga que ver con ustedes.
A partir de ese momento todo se simplifica: nos pasan con una operadora especializada en bajas y amablemente nos pregunta por el motivo. Y no es otro que las insistentes llamadas que recibimos continuamente en casa para ofrecernos darnos de alta en algo que ya estamos dados de alta. Si van a seguir llamando, que lo hagan con motivo, no?
Después de un inicio titubeante en el que trató de explicar que Digital Plus no es responsable de este tipo de acciones comerciales, que se trata de una tercera empresa y que no es su responsabilidad, acepta que, efectivamente, Digital Plus conoce el problema y que podría haberlo solucionado. Se disculpa educadamente y promete ayudarnos a evitar nuevas llamadas.
Para terminar, nos indica que, por las molestias causadas, nos harán un descuento del 20% en los paquetes de canales contratados durante 6 meses.
Hacemos números? 120€ de pérdida de ingresos de Digital Plus como consecuencia de un distribuidor que, empleando su marca e imagen, fustiga a clientes y no clientes con llamadas intempestivas. Cuántas de esas llamadas tienen que tener éxito para compensar la pérdida de imagen y los descuentos que tienen que ofertar a los que se quejan? Confieso que soy incapaz de averiguarlo.
Sois capaces de controlar lo que hacen aquellos que hablan en nombre de vuestras empresas o usan su imagen? Cómo lo hacéis?